Diario del Caquetá, El periódico de los Caqueteños
El pasado lunes, el presidente Iván Duque anunció la designación de Diego Molano como el nuevo ministro de defensa. El cargo que había quedado vacante desde el fallecimiento de Carlos Holmes Trujillo por Covid-19, lo ocupará Molano, quien se desempeñaba como director del Departamento Administrativo de la Presidencia de la República.
El bogotano Diego Molano es egresado de la Universidad del Rosario de la carrera de administración de empresas, además, tiene una especialización en relaciones internacionales de la Universidad Javeriana y una maestría en administración pública de la Universidad de Columbia de Estados Unidos.
En su extensa carrera como servidor público fue asesor de la empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá; alto consejero presidencial para la acción social y cooperación internacional, director del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, precandidato a la alcaldía de Bogotá por el Centro Democrático y concejal de Bogotá por la misma agrupación política, hoy en el gobierno nacional.
Diego Molano recibe una cartera crucial por el momento crítico que hoy vive Colombia. El incremento de los asesinatos de líderes sociales y excombatientes de las Farc; la realización de múltiples masacres en diversos territorios; o el aumento de los grupos ilegales y disidencias; son algunos de los retos que encara. Desafíos que no son menores a la implementación del proceso de paz.
La figura de la revocatoria del mandato se creó en la Constitución de 1991, pero en 30 años no ha producido resultados eficaces. De prosperar los procesos que ahora se inician con los mandatarios elegidos el año anterior, el costo para el Estado sería de unos 200.000 millones de pesos, lo que hace pensar si, en las actuales circunstancias, vale la pena insistir en estos procedimientos.
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