Diario del Caquetá, El periódico de los Caqueteños

“La unidad familiar es muy importante para avanzar en todos los procesos; es mejor, cuando nos tomamos de la mano con la familia para crecer”. Son reflexiones de Yenny Adalid Chilatra Rivera, diputada por el partido Alianza Verde y administradora pública, una auténtica mujer rural caqueteña que nació y se formó en la vereda Villa Hermosa del corregimiento de Santo Domingo jurisdicción del municipio de Florencia.

Ella refiere que hoy existe en esa vereda un colegio internado, con capacidad para 300 niños, además hay puesto de salud y buena carretera, todo liderado por su padre, de quien aprendió el quehacer político desde la perspectiva del liderazgo, la transparencia y los resultados, desde los espacios comunitarios, en contacto con las necesidades de los campesinos y buscando soluciones desde el civismo.

Yenny Adalid Chilatra es la segunda hija de una familia de seis hermanos, habla con orgullo de sus padres Luis Evelio Chilatra y Raquel Rivera, porque de ellos le nació el gusto por el servicio público y el amor por el territorio. “Vivo muy orgullosa de mis padres, ejemplos de vida, líderes y campesinos, tuve la ventaja desde muy joven aprender a discutir cómo solucionar las necesidades de la gente”, comenta mientras insiste en su comprensión del ejercicio político.

Egresada de la Escuela Superior de Administración Pública, única universidad del Estado que prepara para el ejercicio del servicio público, la diputada Yenny Chilatra Rivera es una mujer con carácter, disciplinada, y siempre ha estado dispuesta a servir como persona y ahora como diputada del departamento del Caquetá, su estilo es fiel a su discurso: de la mano con la comunidad. En este camino, planteó modificar el Consejo Territorial de Planeación y lo hizo. Ahora, en este espacio hay cabida para la mujer rural o para los excombatientes.

La diputada en la actualidad continúa con sus estudios de maestría en administración pública, y está empecinada en que ese nivel de especialización se pueda impartir desde Florencia. Ella sabe que la educación abre todas las puertas, y cita también con admiración a su esposo, Alexander Culma, oriundo de la vereda El Vergel, de Puerto Rico, y agrónomo de la UNAD, quien con mucho sacrificio y respaldo de su familia, hoy es un gran profesional.

Con esos valores en su mente y una vocación clara por la administración pública, la diputada Chilatra Rivera tiene claro para dónde va. “Mi objetivo es lograr que las mujeres rurales tengan reconocimiento y calidad de vida, porque cuando las mujeres nos organizamos se impacta todo a nuestro alrededor”. Y en este propósito, con la divisa de la Alianza Verde, representa una voz nueva en el departamento del Caquetá.

Por diario

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